martes, 23 de septiembre de 2014

Horario de oficina (o una forma de auto-censura poco eficaz)

El futuro lo muestran
como un interminable papeleo
donde debes recaudar, sellar
y firmar.
Es la vida una cola
en la cual no importa el sol
ni los atardeceres, ni la brisa fresca
que son meros aditivos
a todo lo numérico
a todo lo real.

La imposibilidad de reír
sin un quince y último
colgarte un carnet en el cuello
bajar la cabeza
y susurrar tus miserias mientras intentas dormir.

Pero no puedes.

Ni reír, ni dormir.

Aunque creas que vives
O que vivimos.

No somos culpables
por nacer

Me autocensuro.


No somos culpables
de los hornos de cal
dónde nos consumimos.


Me autocensuro cada día más. 

sábado, 20 de septiembre de 2014

Azul de luna


La noche tiene habitantes
de todos los colores

Los grillos tocan un standard
en las calles solitarias que frecuento.

Esta es la ciudad de los excesos.

Cada 14 días, 18 horas, 21 minutos y 36 segundos
hay viento de agua
un mar inmenso se tiende sobre nosotros.

Deja de importar París
(una sombra mas del frio)
Londres
(Ruido sordo en la pared)
y Marruecos
(Polvo eres y en polvo te convertirás).

Esta es la ciudad de los excesos
otra cuna a la cual volver.

Cada 14 días, 18 horas, 21 minutos y 36 segundos
un foco incandescente
se arrastra tras de mí.

Y deja de importar
el destino.

martes, 9 de septiembre de 2014

Especular

Llevo un collar de azabache
para espantar
los malos espíritus.
Llevo dos milenios
que chocan en este cuerpo.

No reconozco mi rostro
en el agua.

Hay voces que gritan
me construyen
y me dan un nombre.
Es como nacer
en cada fantasma.

domingo, 7 de septiembre de 2014

Sobre la espera.

Los días
se vuelven en mi contra.

Cada hora
es una ausencia
un cigarrillo que se apaga.

Le tengo miedo a los calendarios.
Me gusta que permanezcan inmóviles
en días que no recuerdo.

viernes, 5 de septiembre de 2014

Mi vida debería tener subtitulos

Mi vida debería tener subtítulos
Mi vida tendría que llevar subtítulos
para que entiendan:             
Nunca quiero decir adiós.

Hacer consciente la soledad
es un asunto difícil.

Los silencios necesitan una voz en off
que te mate de melancolía
como en las películas.

Close-up
(Música de fondo)

Las historias no terminan con los créditos. 

miércoles, 3 de septiembre de 2014

No quiero que regrese la luz.

Mi padre dice:
no salgas
y me siento pájaro.

Me dice: es tarde
mientras se congelan mis piernas
y el tic-tac de mi pecho
lo afirma.

Se cierran todas las puertas
y no quiero que sigan dando cuerda
a la noche
la deseo suspendida sobre nosotros.

Es un destierro al que me someto
el sacrificio de todas las ventanas
en las que descubro miradas ajenas.

Es la habitación una patria
Con banderas de sombra.

Mi padre calla
porque aún no me invento
un mundo posible
un mundo suficiente
algo para contener este cuerpo que se derrama.

Cuando se reanuda el mundo
siempre pierdo algo
en toda esa obscuridad
que intentamos ahuyentar.

martes, 2 de septiembre de 2014